Tras una inspección de las tareas finales de la construcción e instalación de obras para puente permanente sobre Río Quezalapa, de 138.3 metros, el Ministro de Obras Públicas, Gerson Martínez, habilito el paso por el puente, lo que favorece la conectividad vehicular entre los municipios de Suchitoto, Tenancingo y Cinquera, ubicados en los departamentos de Cuscatlán y Cabañas.
La obra fue concluida en el tiempo estipulado en el contrato, con una inversión de 3.6 millones de dólares, donde se incluye financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica y donación del Reino de Noruega al Gobierno de El Salvador. Se constituye en el puente modular más largo de los instalados en los últimos años.
Se localiza a 8.6 kilómetros al oriente de la zona urbana de Suchitoto, Cuscatlán, y continúa por la carretera que conduce a Cinquera, Cabañas. Consiste en la construcción de un puente definitivo, posee dos carriles de circulación de 3.66 metros cada uno, con un ancho de rodaje de 7.32 metros y un paso peatonal de 1.50 metros.
Cuenta con cuatro tramos de superestructura metálica, tipo Acrow, y una subestructura apoyada en tres pilas centrales y dos estribos de concreto reforzado. Los estribos están provistos de aletones en ambos extremos para proteger los terraplenes contra la erosión.
Con esta obra, el MOP brinda un mayor nivel de seguridad vial a los usuarios del puente especialmente ante eventos extremos, impulsa el desarrollo de la zona mediante la construcción de una estructura que permite a los habitantes de la zona, un mayor intercambio comercial, acceso a servicios sociales e incremento de actividades turísticas, y lo más importante es que garantiza la conectividad de la zona en cualquier época del año.
Para evitar la interrupción de la conectividad en la zona y disminuir el riesgo a los usuarios durante la ejecución del proyecto, se construyó un paso provisional de 150 metros de longitud, con un puente metálico de 45 metros paralelo al puente 30 metros aguas arriba.
Entre las principales obras ejecutadas se encuentran:
Adicionalmente se instalarán guarda carriles en los accesos, colocación de señalización tanto vertical como horizontal, construcción de drenajes y se ejecutarán medidas ambientales para prevenir, atenuar y compensar los impactos negativas ocasionados al medio ambiente con la construcción de las obras.
El problema que originó la construcción de este nuevo puente se dio en noviembre de 2009. La tormenta Ida, causo daños al puente Quezalapa, especialmente en el acceso poniente de la estructura, se registró un incremento del depósito de materiales y la pérdida completa de los barandales, por lo que se interrumpió la conectividad, la que fue restablecida días después con la reconstrucción del acceso erosionado.
Sin embargo, con la Depresión Tropical 12-E en octubre de 2011, nuevamente se dio erosión en el acceso poniente reconstruido y adicional la cantidad de materiales depositados aguas arriba del puente se incremento, reduciendo aun más el área hidráulica del rio.